TU ESTILO DE
VIDA ACTIVO Y SALUDABLE
El estilo de
vida activo y saludable, es la forma como vives tu día a día de una manera que
no atentas contra tu salud, y aumentas la probabilidad de tener una vejez
saludable.
Una persona
saludable, considera los siguientes aspectos:
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Peso ideal
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Salud cerebral
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Salud de la piel
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Salud de articulaciones
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Salud digestiva
Lograr un estilo de vida
activo y saludable puede sonarte en ocasiones casi imposible de lograr, pero si
sigues estos cuatro aspectos y recomendaciones notarás que es más fácil de lo
que parece.
1. Aliméntate
saludable y nutritivamente. Nuestra dieta
debe cumplir con las siguientes características:
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Debe
ser completa: debe aportar
todos los nutrientes que necesita el organismo: Macronutrientes, micronutrientes,
fitonutrientes, fibra y agua.
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Debe
ser equilibrada: los nutrientes
deben estar repartidos guardando una proporción entre sí. 40% de carbohidratos,
30% de proteínas y 30% de grasas.
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Debe
ser suficiente: la cantidad de
alimentos ha de ser la adecuada para mantener el peso dentro de los rangos de
normalidad y controlar las calorías que se ingieren diariamente.
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Debe
ser adaptada a la edad, al
sexo, a la talla, a la actividad física que se realiza, al trabajo que
desarrolla la persona y a su estado de salud.
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Debe
ser variada: debe contener
diferentes alimentos de cada uno de los grupos (lácteos, frutas, verduras y
hortalizas, cereales, legumbres, carnes y aves, pescados, etc.), no solo
porque con ello será más agradable, sino porque, a mayor variedad, habrá
también una mayor seguridad de garantizar todos los nutrientes necesarios.
2. Has ejercicio con
regularidad
A lo largo de los últimos años, las
recomendaciones de las sociedades médicas han ido cambiando con el paso de los
años. En los años 80’s se recomendaba
hacer 20 minutos 3 veces a la semana; en los 90’s se pasó a 30 minutos la mayoría
de los días; y en el año 2000 con la llegada del nuevo milenio se recomendaba
60 minutos de actividad física diaria. Como
normalmente no contamos con ese tiempo, la ciencia recomienda que con realizar
30 minutos diariamente de actividad física ya se obtienen grandes beneficios.
El incremento de las recomendaciones
de actividad física, se debe a que con el paso de los años y la tecnología, las
personas cada día son más sedentarias en sus trabajos y actividades diarias, ya
que aumenta el uso de celulares, tabletas, videojuegos, computadores,
ascensores, automóviles, escaleras eléctricas, vehículos motorizados, entre
otros, o dime, ¿conoces algún vecino que saque su moto para ir a la tienda que
queda a dos cuadras? O lo que es peor, ¿eres tú ese vecino?
Estas son algunas actividades que
puedes hacer si no cuentas con el tiempo suficiente para consentir tu cuerpo
con ejercicio.
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Salir a caminar a un paso activo
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En vez de tomar el autobús, caminar o tomar la bicicleta
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Bajarse del autobús algunas paradas antes y llegar caminando
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Dejar el automóvil parqueado lo más lejos posible de la entrada del
lugar al que vas
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Tomar las escaleras en vez del ascensor o las escaleras eléctricas
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Inscribirse en maratones o carreras atléticas, la idea no es ganar sino
motivarte con otras personas que hacen la misma actividad, ya que tú la harás a
tu propio ritmo sin atentar contra tu salud.
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Utiliza tu imaginación y tus actividades diarias para moverte lo más que
puedas.
3. Descansa
El descanso es fundamental
para que el cuerpo tenga sus periodos de recuperación y cambie las actividades
rutinarias a que lo tenemos acostumbrado.
Descansar no se limita únicamente a dormir en la noche, también incluye
otras actividades fáciles de realizar
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Duerme de 6 a 8 horas diariamente
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Realiza pausas activas en tu trabajo como
estiramientos, juegos de concentración, juegos de distracción, entre otros
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Sal de vacaciones una vez al año
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Ríete, ya que es una de las actividades más
relajantes y fáciles para el cuerpo humano.
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Si trabajas sentado todo el día, procura
sentarte de diferentes maneras, como cruzando los pies, separándolos, estirándolos,
etc.
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El yoga es una actividad relajante y puede ayudar a tu cuerpo más de lo que te
imaginas.
4. Toma
suficiente agua
Nuestro cuerpo se compone en
promedio de 70% de agua, por eso es recomendable ingerir entre 8 a 12 vasos de
agua diariamente para mantener unos niveles normales de hidratación. Utiliza la siguiente tabla para guiarte con
este fácil tema.
¿No te gusta el agua?: Es común
encontrar personas que no están acostumbradas a ingerir agua comúnmente, e
inventan mil razones para no hacerlo, algunos consejos que puedes seguir son:
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mezcla un trozo de tu fruta favorita en un
recipiente con agua para que el agua tome sabor a la fruta y así disfrutar del líquido.
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Si no eres capaz de cambiar el hábito drásticamente,
inicia aumentando la cantidad de ingesta de agua día por día, así el primer día
solo tomaras un vaso de agua, el segundo puedes incrementar medio vaso más, y
al final del mes ya será natural tomarte los 8 vasos recomendados.